El año que pasó fue récord para las ventas de entradas correspondientes al cine nacional, con unas 6.950.000 localidades. Sin embargo, como suele pasar todos los años, el gran porcentaje de ese total fue gracias a un puñado de éxitos.En el 2013, fueron 7 las películas argentinas que superaron la barrera de los 100.000 espectadores.
Ellas son:
1) METEGOL: 2.118.448 espectadores.
$ 78.852.428.- (pesos).
2) CORAZÓN DE LEÓN: 1.718.078 espectadores
$ 60.107.230.- (pesos).
3) TESIS SOBRE UN HOMICIDIO: 1.023.737 espectadores
$ 31.154.439.- (pesos).
4) SÉPTIMO: 961.705 espectadores.
$ 33.050.949.- (pesos).
5) WAKOLDA: 407.737 espectadores.
$ 13.484.834.- (pesos)
6) VINO PARA ROBAR: 169.289 espectadores.
$ 5.640.846.- (pesos)
7) LA RECONSTRUCCIÓN: 101.000 espectadores.
$ 3.192.153.- (pesos).
1) METEGOL: Realmente no resultó ninguna sorpresa por tres motivos. Primero, por tratarse de la película argentina más esperada en años. El regreso a la dirección del oscarizado Juan José Campanella, sumado a su debut en la realización de la película más costosa y ambiciosa del cine argentino.
Segundo, el filme en cuestión fue una animación, el género más popular en la Argentina. Y por último, una fecha de estreno en las puertas de las vacaciones de invierno, alejado de otros tanques similares.
Con 2,1 millones de espectadores, vendió lo mismo que los éxitos animados más grandes de las últimas décadas (“Manuelita”, en el ´99; y “Patoruzito”, en el 2004), las cuales con sus presupuestos sumados no llegan ni al 20% de lo que costó “Metegol” (aunque claro, esta se vendió a más de 70 países, mientras que las otras dos apenas pudieron sumar una media docena de mercados).
Aún así, la película fue el éxito que se esperaba, aunque no pudo ir más allá. “Mi Villano Favorito 2″ seguía fuerte en a taquilla, y además no era una propuesta que llamara demasiado la atención del público femenino (que sí suele consumir animaciones, y no me refiero sólo a “las nenas”….).
2) CORAZÓN DE LEÓN: esta sí fue la sorpresa del año. La última película protagonizada por Guillermo Francella que llegaba al millón de espectadores data de 2005; pero esta comedia romántica superó las marcas de todas sus comedias familiares anteriores.
La clave estuvo en saber mezclar la comedia blanca por la que el actor es mejor conocido, y un mejor cuidado en el guión y la realización, lo que atrajo a parejas y espectadores un poco más exigentes a la hora de elegir una película (no demasiado exigentes, tampoco la pavada… no deja de ser una comedia “de Francella“, después de todo).
3) TESIS SOBRE UN HOMICIDIO: el primero de los dos thrillers protagonizados por Ricardo Darín del año fue el más exitoso, aunque por un márgen mínimo, lo que significa que el actor tiene un público cautivo. Hacía tiempo que las películas de Darín no llegaban al millón de espectadores (aunque quedaban por ahí cerca) y tras un fuerte drama como fue “Elefante Blanco” (en 2012), la gente disfrutó verlo en una película de suspenso más tradicional. La falta de competencia fuerte para el público adulto en los primeros meses del verano también le ayudó mucho.
4) SÉPTIMO: el segundo thriller protagonizado por Darín interpretando a un abogado en el 2013…. “Tesis…” no terminó de convencer a muchos espectadores (especialmente su resolución) y “Séptimo” tuvo un boca en boca más flojo, además de tremenda competencia por parte de Guillermo Francella…. Eso no frenó a este thriller que quedó al borde del millón de espectadores. Pero el 60% del total de ventas lo logró en sus primeros once días, lo que indica que pese al enorme éxito inicial, el resultado final podría haber sido mucho mejor de haber funcionado en el boca en boca.
5) WAKOLDA: junto con “Corazón de León”, este drama de Lucía Puenzo fue el título nacional que mejor funcionó en el boca en boca precisamente, permaneciendo entre las diez más vistas por nueve semanas (muy poco usual para el cine argentino). Los buenos comentarios, el elenco sumado a lo interesante de la trama y el tratamiento dado (más cercano a un thriller que al drama) le permitió convertirse en una muy buena opción para el público adulto (el cual, a menos que sea algo de Woody Allen, se está alejando de las películas “de conversación”, por más buenas que sean…).
6) VINO PARA ROBAR: si bien fue exitosa, esta fue la decepción del año. Lo nuevo de Ariel Winograd (“Mi Primera Boda”) es una de las películas más disfrutables de los últimos tiempos (de esas que se pueden ver más de una vez sin cansarse), con una dupla muy llamativa como Daniel Hendler (fresco del éxito televisivo de “Graduados”) y Valeria Bertucelli; en un género del que hay pocos exponentes en el cine argentino (las “caper movies”, o películas de grandes robos, con su respectiva planificación y puesta). Se esperaba un rendimiento similar al de “Mi Primera Boda” (300.000 espectadores) pero consiguió sólo la mitad. No le jugó a favor el que dos semanas después de su estreno llegara “Corazón de León” que consiguió el segundo mejor arranque de la historia para para una película nacional y acaparó a casi todo el público interesado en ver una comedia argentina….
7) LA RECONSTRUCCIÓN: el regreso a la dirección de Juan Taratuto tras el enorme éxito de “Un Novio para mi Mujer” era una de las apuestas fuertes del primer semestre. Más aún si retomaba equipo con Diego Peretti, a quien dirigió en las muy exitosas “No sos vos soy yo”; y “¿Quién Dijo que es Fácil?”.
Pero tras un muy buen arranque, la película se desplomó rápidamente por el boca en boca negativo. No tanto porque la película fuera mala (que no lo es) sino que sufrió del “efecto Marziano”. Al igual que con esa película con Guillermo Francella, el público parece que esperaba una comedia del tándem actor/director y terminó encontrándose con un seco melodrama más cercano a las películas de Carlos Sorín. La película vendió en su primer semana el 40% del total de entradas cortadas en toda su carrera comercial…

0 comentarios:
Publicar un comentario